#oratoriaescolar
Oratoria, interpretación, juegos comunicativos, son necesarios con mayor presencia en las aulas para que nuestros hijos lleguen a perder el miedo a hablar en público. Deben aprender que comunicarse es fundamental y así ganar confianza en sí mismos.
Leí un articulo esta semana en la que se exponía la necesidad de tener asignaturas relacionadas con la oratoria con mayor presencia en las aulas. Llevo años reclamándolo. Entendamos lo que es reclamar. Vivo en un municipio de 100.000 habitantes en Madrid. El colegio de mis hijos es uno de los más grandes del municipio, con cinco líneas por curso, y unos 2.500 alumnos desde infantil hasta bachillerato, y nada de nada. Y por lo que veo en los centros cercanos tampoco.
Entiendo que el profesorado no es experto en esta materia, de hecho muchos de ellos se preparan en oratoria y comunicación no verbal para superar sus oposiciones, e incluso se notan los efectos secundarios del pánico escénico en sus reuniones de padres cada año. No se les exigía en su formación. Se sienten seguros ante los alumnos explicando la materia que deben enseñar, pero cómo los más pequeños, pierden seguridad cuando se meten en terrenos cuestionables y pueden ser juzgados por sus iguales o superiores, en este caso los padres.
El teatro puede ser un buen arranque
En mi colegio existe la extraescolar de teatro. Fue lo primero a lo que apunté a mi vergonzosa hija. Le costaba hasta saludar a los vecinos y dar los buenos días. Cada vez que un adulto se dirige a cualquiera de los dos, porque tengo dos hijos, bajan la cabeza. Se defienden mucho con sus iguales y son espontáneos y divertidos en círculos cerrados. No pretendo que sean como yo, ni extrovertidos al máximo, cada uno tiene su carácter, pero si quiero dotarles de herramientas suficientes para que sean capaces de confiar en ellos mismos, explicar lo que les sucede, lo que necesitan o lo que desean. Explicar lo que son y como son. Ser capaces de defender un pensamiento y exponer todo ello sin miedo.
No pretendo que sean actores, ni periodistas, ni siquiera comerciales, pero tendrán que defender exámenes, videoconferencias, proyectos, entrevistas de trabajo e incluso sus propias ideas en cualquier debate de la vida. Y sufrir por hacerlo, tampoco es forma de vivir.
Las herramientas de comunicación se aprenden
Estas herramientas se aprenden. Tienen técnica. Dejando a un lado el espontáneo, que también las necesita porque es espontáneo no ordenado en la oratoria, el resto aprendemos a todo en esta vida. Comunicar también se aprende.
Retomo lo anterior. Apunté a mi hija a teatro. La interpretación tiene grandes herramientas de comunicación, sobre todo iniciales, subirse a un escenario, exponerse al público y a los compañeros, aprender un texto, decirlo y hacerlo tuyo y aunque no lo parezca cuando te escondes detrás de un disfraz y un personaje que no eres tú, es más fácil, al final esa es tú defensa. Pero sirve para rodar y luego ser capaz de hacer lo mismo con tu propio personaje. Descubrir quien eres y darte una trama.
Mi descontento fue que teatro al final consistía en una frase por niño, que practicaban sin parar, un disfraz y una obra para los padres justificando el cobro. Esta bien, no digo que no, pero ya que el teatro y la oratoria no son clases regladas, aunque deberían, yo buscaba un aprendizaje real, no un lugar más donde poner un disfraz y llevar a los abuelos al final de cada trimestre para ver a su nieta lo monísima que está, que puede ser un resultado más, por su puesto… pero detrás deben existir herramientas reales. Y no se enseñaban. No creo ni que se sea consciente de que existen en muchos casos.
Yo lo intento. Y trabajo mucho con ellos. Porque además son tímidos. Les pongo delante de las cámaras a modo de juego. Practicamos entrevistas. Cuando no encuentran palabras para explicarme algo no me detengo hasta que consiguen finalizar la historia. Les ordeno las historias que me cuentan. Jugamos a ser personajes. Nos imitamos. Incluso pongo ejercicios para que ellos se dirijan a su médico, portero o vecino. Les invito a pedirnos un refresco en el bar y ser independientes, oralmente hablando. Poco a poco les iré formando en las herramientas básicas.
El artículo que leí esta semana me gusto. Destaca los estudios y avances de Neil Mercer, Doctorado en psicolingüística por la Universidad de Leicester (Inglaterra) y profesor emérito de Educación en la Universidad de Cambridge, sus investigaciones han explorado el papel que desempeña el diálogo en la educación y desarrollo del razonamiento en los niños. Y en como afecta a su desarrollo, aprendizaje y notas finales.
Hablan de datos…. ya sabéis que yo en mis post intento no daros datos, si no la aplicación en mi propia vida de la comunicación y su necesidad. Pero son datos increíbles los que muestran las encuestas. El sufrimiento de los españoles en este campo y como consecuencia de nuestros pequeños.
Además los beneficios que destacan de la oratoria en el ser humano son más que evidentes. La oratoria te da seguridad, gestionar las emociones, tal y como os comente en uno de mis videos de youtube “claves para comunicar”, hay que buscar en nuestra emoción para salir con ella ya en la comunicación, seguridad en uno mismo, que te lleva a liderar, empatía, tolerancia… Os recomiendo leer el artículo (pincha aqui)
Además os deja luego un link de como trabajar en casa con los más pequeños las habilidades de oratoria.
Y vosotros ¿pensáis qué se necesita incluir más presencia homologada en los colegios?, ¿profesionales de la comunicación que enseñen? Lo que está claro es que en los máster de adultos lo incluyen, será que la carencia es evidente ¿no?.
Me encantaría saber vuestra opinión, porque ya sabéis, no confío en la objetividad de la información, al final somos lo que somos por lo que nos pasa, así que comunicamos pensamientos, ideas según nuestras vivencias.
“La objetividad de la comunicación depende de tu capacidad de empatizar contigo mismo”.”
ROCÍO BRACERO