#tuvequeparar
Me encanta que finalice el Estado de Alarma, por razones importantes, deja entrever que la vacunación se está acelerando, que las UCIS, aunque aún sufriendo van encontrando un equilibrio, que las personas de mayor riesgo tienes ya su segunda dosis y que todos podemos recuperar un poco de libertad que me sorprende confundamos con irresponsabilidad.
No soy quien para juzgar a nadie, ¡Dios me libre!, nunca lo haría ni quiero que se mal interprete el tono de mi post. Creo que hay que tener las manos muy limpias en esta vida para juzgar a alguien o hacer juicios de valor, así que no va por ahí, lo único que hago siempre es mostrar la visión y la percepción de mi realidad, por si alguien se siente identificado.
Yo no he cumplido todas las normas establecidas, claro que no. Creo haber sido responsable. Haber empatizado con los demás, haber cuidado a mis mayores, pero he intentado vivir dentro de las restricciones. He intentado ser coherente con mi forma de pensar y de lo que entiendo y he aprendido por un aislamiento sanitario. He tenido grupos burbuja, higiene, uso de mascarillas, he respetado la movilidad, que no comparto, pero respeto… y sobre todo he seguido a raja tabla una gran premisa, no poner en riesgo al de al lado. Todas las pruebas necesarias, todas las veces oportunas, distanciamiento, mascarillas y mucho respeto y miedo por no hacer daño a nadie.
No es una justificación a nada, es que no entiendo las incoherencias rotundas de esto sí y esto no porque yo lo digo. Y esta pandemia esta marcada por ellas. Lo que se vivió en el final del Estado de Alarma en La Puerta del Sol, en las playas de Barcelona, etc… no tiene sentido de ningún tipo. Soy consciente de la exageración de los medios de comunicación, y yo también he sido joven, y entiendo que es muy duro lo que se están viviendo, pero me parece terrible que juguemos así con el esfuerzo del sistema sanitario que aún están agotados y pagando a duras penas todos los esfuerzos e incluso sufriendo las secuelas del gran dolor que han sufrido. Es por ellos por los que hay que vivir respetando ahora.
Creo que ha llegado el momento, con esta vacunación acelerada que se quiere hacer, de devolverle a los médicos y sanitarios su esfuerzo. Creo que nos corresponde hacer un acto de consciencia y cuidarles. Necesitan descansar, sonreír y encontrar un sentido a lo que ha sacrificado y creo que con esas imágenes hacemos justo lo contrario.
Acabar el Estado de Alarma nos devuelve derechos fundamentales como libertad de movimiento y de decisión, que todos merecemos, porque todos nos hemos esforzado. Pero aún la sociedad no está curada. Claro que sí! podemos celebrar!, debemos celebrar!, se puede salir a terrazas, continuar con los grupos burbujas, yo no abandone a la restauración en ningún momento, y creo que sí cometemos actos de este tipo seguirá siendo un sector que sufrirá.
Yo deseo la libertad como todos, pero hay que seguir manteniendo un poco de cordura, responsabilidad y empatía. y de corazón entiendo a la gente joven, pero se puede salir con más libertad sin faltar el respeto con actos de ese tipo a toda una sociedad y un sistema sanitario.
Es difícil, desesperante y cruel lo que estamos viviendo. Y más para unos que para otros, por supuesto…. algunos han perdido familiares o amigos, otros han vivido momentos crueles, miedo, otros han perdido empleos, empresas…. y es momento de volver a reinventarse y empezar. No de volver donde lo dejamos. Siempre lo pensé así, jamás volveremos a lo mismo ni a ser los mismos, porque algo así nunca nos lo va a permitir. Es mi segundo aislamiento sanitario unido al primer y todo cambia. Así que no ansiemos recuperar lo que dejamos hace un año y busquemos lograr algo mejor y adaptado.
Feliz lunes de mayo, como siempre mi humilde opinión.
“He redescubierto lo que se ve a través de mi ventana”
ROCÍO BRACERO